Aproximaciones y fallos: Escritura manual y marítima

por
Invitame un café en cafecito.app

1. Después de mucho tiempo vuelvo a escribir a mano de forma extensa. Sigo el ritmo de las ideas y, al mismo tiempo, soy testigo del error que cometen las palabras para registrarlo. De ese fallo inicial nace este texto. 

· · ·

2. Cuando esto sea leído, si es que eso sucede, no va a poder diferenciarse la escritura a mano de la mecánica. Los gestos importantes suelen tener el destino final de lo invisible. 

· · ·

3. Lo trascendente y lo imperceptible se mimetizan igual que un pequeño cuervo negro con la sombra. 

· · ·

4. Mi mano siente la sangre que se mueve hacia ella. La inspiración, por el contrario, no se deja registrar de manera tan evidente. 

· · ·

5. A medida que la escritura avanza, también lo hacen los tachones. El arrepentimiento siempre es el sentimiento más visible.



6. No hay gesto que anule o borre lo que se dice en voz alta. Apenas si existen intentos para lograr eso con los mensajes escritos. La literatura, entre todas sus exigencias, al menos mantiene esa concesión a la duda. 

· · ·

7. Si nuestras conversaciones de este último tiempo hubieran sido escritas a mano, estarían llenas de tachaduras. ¿Serán esas líneas gruesas las que rajan el ánimo y el cuerpo ahora mismo?

· · ·

8. El mismo cuervo negro del punto 3 ahora se pierde entre la vegetación domesticada de esta plaza en Barcelona. Lo trascendente y lo imperceptible se dan siempre en movimiento.

· · ·

9. Este texto escrito a mano es una prueba de ese desplazamiento constante. Ese perro blanco como una nube que acaba de pasar corriendo, también. Tu recuerdo, aunque parezca permanente y estático, también. 

· · ·

10. No quería que este texto terminara rondando el terreno de la tristeza. Pero parece que eso es lo que saben tallar mis manos. A la mañana, cuando miré el mar bajo el mismo sentimiento, un poema de Mary Oliver vino a mi cabeza. Así termina: “y me digo a mí misma, soy desdichada/ ¿qué debo…?/ ¿qué debería hacer? Y el mar responde/ con su hermosa voz: ‘Lo siento, tengo trabajo que hacer’”. La corriente del mar es la escritura a mano más potente de todas.



** Conscientes del momento económico complejo en el que gran parte de la sociedad se encuentra, dejamos abierta una vía de colaboración mínima mensual o por única vez para ayudarnos a hacer nuestro trabajo, sobre todo a la hora de solventar los gastos – muchas veces invisibles- que tienen los medios digitales. Sumate a LPP y HACÉ CLIC ACÁ 🙂.

☕ ☕También podés donarnos un cafecito o la cantidad que quieras ❤️.