Poesía latinoamericana y diversidad: cinco poemas para el Día del Orgullo

por
Invitame un café en cafecito.app

En el Día del Orgullo LGBTIQ+, proponemos una selección de cinco poemas de distintos países latinoamericanos para pensar la diversidad a partir de la literatura. Voces con estilos diferentes que se entrecruzan desde diferentes tono que van de la denuncia a la narración, que visibilizan identidades y conquistas en una sociedad donde el orgullo es una respuesta política.



Oración – Cristina Peri Rossi (Uruguay, 1941)

Silencio.
Cuando ella abre sus piernas
que todo el mundo se calle.
Que nadie murmure
con cuentos ni poesías
ni historias de catástrofes
ni cataclismos,
que no hay enjambre
mejor que sus cabellos
ni abertura mayor que la de sus piernas
ni bóveda que yo avizore con más respeto
ni selva tan fragante como su pubis
ni torres y catedrales más seguras.
Orad: ella ha abierto sus piernas.
Todo el mundo arrodillado


(Te puede interesar: Poesía argentina y diversidad: 5 poemas sobre el Orgullo)


Manifiesto (hablo por mi diferencia) – Pedro Lemebel (Chile, 1952-2015)

No soy Pasolini pidiendo explicaciones
No soy Ginsberg expulsado de Cuba
No soy un marica disfrazado de poeta
No necesito disfraz
Aquí está mi cara
Hablo por mi diferencia
Defiendo lo que soy
Y no soy tan raro
Me apesta la injusticia
Y sospecho de esta cueca democrática
Pero no me hable del proletariado
Porque ser pobre y maricón es peor
Hay que ser ácido para soportarlo
Es darle un rodeo a los machitos de la esquina
Es un padre que te odia
Porque al hijo se le dobla la patita
Es tener una madre de manos tajeadas por el cloro
Envejecidas de limpieza
Acunándote de enfermo
Por malas costumbres
Por mala suerte
Como la dictadura
Peor que la dictadura
Porque la dictadura pasa
Y viene la democracia
Y detrasito el socialismo
¿Y entonces?
¿Qué harán con nosotros compañero?
¿Nos amarrarán de las trenzas en fardos
con destino a un sidario cubano?
Nos meterán en algún tren de ninguna parte
Como en el barco del general Ibáñez
Donde aprendimos a nadar
Pero ninguno llegó a la costa
Por eso Valparaíso apagó sus luces rojas
Por eso las casas de caramba
Le brindaron una lágrima negra
A los colizas comidos por las jaibas
Ese año que la Comisión de Derechos Humanos
no recuerda
Por eso compañero le pregunto
¿Existe aún el tren siberiano
de la propaganda reaccionaria?
Ese tren que pasa por sus pupilas
Cuando mi voz se pone demasiado dulce
¿Y usted?
¿Qué hará con ese recuerdo de niños
Pajeándonos y otras cosas
En las vacaciones de Cartagena?
¿El futuro será en blanco y negro?
¿El tiempo en noche y día laboral
sin ambigüedades?
¿No habrá un maricón en alguna esquina
desequilibrando el futuro de su hombre nuevo?
¿Van a dejarnos bordar de pájaros
las banderas de la patria libre?
El fusil se lo dejo a usted
Que tiene la sangre fría
Y no es miedo
El miedo se me fue pasando
De atajar cuchillos
En los sótanos sexuales donde anduve
Y no se sienta agredido
Si le hablo de estas cosas
Y le miro el bulto
No soy hipócrita
¿Acaso las tetas de una mujer
no lo hacen bajar la vista?
¿No cree usted
que solos en la sierra
algo se nos iba a ocurrir?
Aunque después me odie
Por corromper su moral revolucionaria
¿Tiene miedo que se homosexualice la vida?
Y no hablo de meterlo y sacarlo
Y sacarlo y meterlo solamente
Hablo de ternura compañero
Usted no sabe
Cómo cuesta encontrar el amor
En estas condiciones
Usted no sabe
Qué es cargar con esta lepra
La gente guarda las distancias
La gente comprende y dice:
Es marica pero escribe bien
Es marica pero es buen amigo
Súper-buena-onda
Yo no soy buena onda
Yo acepto al mundo
Sin pedirle esa buena onda
Pero igual se ríen
Tengo cicatrices de risas en la espalda
Usted cree que pienso con el poto
Y que al primer parrillazo de la CNI
Lo iba a soltar todo
No sabe que la hombría
Nunca la aprendí en los cuarteles
Mi hombría me la enseñó la noche
Detrás de un poste
Esa hombría de la que usted se jacta
Se la metieron en el regimiento
Un milico asesino
De esos que aún están en el poder
Mi hombría no la recibí del partido
Porque me rechazaron con risitas
Muchas veces
Mi hombría la aprendí participando
En la dura de esos años
Y se rieron de mi voz amariconada
Gritando: Y va a caer, y va a caer
Y aunque usted grita como hombre
No ha conseguido que se vaya
Mi hombría fue la mordaza
No fue ir al estadio
Y agarrarme a combos por el Colo Colo
El fútbol es otra homosexualidad tapada
Como el box, la política y el vino
Mi hombría fue morderme las burlas
Comer rabia para no matar a todo el mundo
Mi hombría es aceptarme diferente
Ser cobarde es mucho más duro
Yo no pongo la otra mejilla
Pongo el culo compañero
Y ésa es mi venganza
Mi hombría espera paciente
Que los machos se hagan viejos
Porque a esta altura del partido
La izquierda tranza su culo lacio
En el parlamento
Mi hombría fue difícil
Por eso a este tren no me subo
Sin saber dónde va
Yo no voy a cambiar por el marxismo
Que me rechazó tantas veces
No necesito cambiar
Soy más subversivo que usted
No voy a cambiar solamente
Porque los pobres y los ricos
A otro perro con ese hueso
Tampoco porque el capitalismo es injusto
En Nueva York los maricas se besan en la calle
Pero esa parte se la dejo a usted
Que tanto le interesa
Que la revolución no se pudra del todo
A usted le doy este mensaje
Y no es por mí
Yo estoy viejo
Y su utopía es para las generaciones futuras
Hay tantos niños que van a nacer
Con una alíta rota
Y yo quiero que vuelen compañero
Que su revolución
Les dé un pedazo de cielo rojo
Para que puedan volar.

(Te puede interesar: Diversidad en la pantalla: cinco películas recomendadas para la Semana del Orgullo)



69 – Naty Menstrual (Argentina, 1975)

¿Vivo atrapada en un cuerpo de mujer o en un cuerpo de hombre?
¿Cuál es mi jaula?
Vivo atrapada creando abismos sin desarrollar la habilidad del salto, paralizada al borde del miedo.
Crearme y recrearme y rodearme de los que participan
de mi verdad mentira.
Circular por un territorio de puta objeto en busca de amor intelectual, difícil premisa.
No busco más, sólo hay migajas de sexo.
Ser lo que no se debe ser, lo que nadie quiere ver
como un verdugo de conciencias.
¡A la horca! ¡A la cárcel! ¡Al cadalso!
¡A donde mierda sea pero que el puto no se vea!
Aletean los sexos de los que me niegan en mi orificio tibio y danzante y soy la única culpable,
la reina de las perversiones…
un monstruo ambulante.

(Te puede interesar: Archivo de la Memoria Trans: la memoria de sobrevivientes en la pantalla)


Los nuevos amores – Violeta Barrientos (Perú, 1963)

Vine a descubrir lo imposible
mi deseo en un cuerpo igual al mío
calmado en sus preguntas, inquieto en sus reflejos.
No puedo huir al destino que se acerca.
¿Más fuerte sellaron esos labios otros besos?
Cómo saberlo. Cavé un mundo entero
en mi corazón y aún está fresco.
Para creer en mí,
alguien traspasará sus dedos por mi costado,
alguien colmará ese vacío.
Que la vida se resquebraje
y los miedos recién llegados, partan
los muros de la ciudad, esos altos nombres.
Recobraré entonces mi voz perdida
y no se empañará mi aliento;
se clavará un intenso grito de borde a borde
limpia y recta, mi palabra surcará los aires
cuando el nuevo amor encuentre mi cuerpo
y tiemblen los vientos, los amores viejos
y los ríos revienten en mi pecho.

(Te puede interesar: Cinco series LGBTIQ para cerrar el mes del Orgullo)



Una galaxia llamada Ramón – Mariano Blatt (Argentina, 1983)

La otra vuelta Ramoncito le puso un yuyo al mate
eran como las 10 de la mañá
cosa q nos empezamos a reír y mirar re bien
entonces Ramo dice
eh, rubio
vamo a agarrar la motito
y por el camino de tierra q es barro
le damos hasta el cruce con la ruta
ahí zas le damos derecho q yo conozco un campo
vos llevá el mate allá hay más yuyo
cosa que cuando yo iba atrás en la moto
re agarrado a Ramo que silbaba
pero clá el viento ni escuchar me dejaba
así que en una que desacelera un toque
para evitar el barro loco
le digo Ramo no silbé
Ramo cantá
entonces Ramoncito medio que se saca la remera
con una mano
y con la otra maneja la moto
habilidad
(yo con las dos me abrazaba a Ramoncito
y me picaba la nariz porque el pelo se volaba re bien)
cosa que me pasa la remera y me dice
teneme rubio
soy castaño, Ramo, le digo
sos hermoso, me dice
cosa que llegamos y Ramo recolecta unos yuyos
son los yuyos mágicos
me dice
los yuyos santiago del estero
le pone unos al mate y me pone unos en la boca
que a medida que se van disolviendo
me hacen la locura más linda de Argentina
onda cierro los ojos los abro
y está Ramo en cuero
cierro los ojos los abro
está Ramo con la camisa abierta
cierro los ojos los abro
Ramo con la boca gigante
cierro abro
Ramo bailando
cierro abro
Ramo trepado a un árbol
cierro abro
Ramo en casa me dice te quiero
cierro abro
Ramo baila
cierro
Ramo con rulos
abro
Ramo maneja un tren
cierro uno el otro lo tengo abierto
Ramo me dice ¿qué guiñás, rubio,
gustás?
Ramón, le digo
el mundo gusta de vos
esa vaca
gusta de vos el yuyo
la moto el camino y el barro
todo el pueblo
yo pregunté
gusta de vos
dios gustaba tanto de vos
que desapareció
y bue ahí se inventó la poesía
el baile y la música
para que todos puedan gustar de vos
sin enfermarse la cabeza
el corazón la vida la boca
que la tenés re grande
el labio partido ¿quién te partió el labio, Ramo?
aprovecho para preguntar
nací así
me dice
una vez me pelié en la esquina del pueblo
pero gané yo
dice Ramo así medio mentiroso
entonces el yuyo santiago del estero
que tenía en la boca pero también tenía en el mate
nos hace reír mucho muchísimo
y Ramo me abraza me dice rubio
este abrazo va a quedar para siempre
de ahora en más cuando no te dé el cuero
vas a cerrar los ojos y vas a pensar
en el abrazo que te dio Ramo en el campo
y ahí zas vas a ver cómo el cuero te vuelve
para encarar cualquier cosa
lo más grande que te podés llevar
me dice Ramo
es la amistá y este abrazo re fuerte re loco
que te dio Ramoncito el pibe de rulos
que conociste en Santiago
que te dijo algo de unos yuyos y que te enseñó a bailar
arriba de la moto
arriba del tren
cierro abro
Ramo jugando a la pelota
cierro abro
Ramo es un yuyo gigante
hermoso, re loco
cierro abro
no quiero volver a cerrar
o quiero cerrar
y que esté Ramo
para siempre para la prehistoria
el prefuturo y los viajes
intergalácticos e interneuronas
viajes re profundos
que podés hacer para adentro tuyo hay un tronco muy viejo
salido de la laguna de un incendio
de otra época geológica otra época
intergaláctica
Ramón tengo el corazón muy chico
y vos sos muy grande, capaz por eso me duele
cosa que Ramo toma mate me mira y me dice
escuchá, rubio
el corazón tuyo es el más grande
como el de todos
cada uno tiene un mundo entero
adentro del corazón
más grande que dios
y más rápido que una moto
se llama vértigo de locura y amor
yo me llamo Ramón y me voy a quedar al lado tuyo
para siempre para que no llores
para que sonrías, rubio
cuando vos sonreís a Ramoncito también le pasan cosas
hoy a la mañana te cebé un mate
y le decía al agua que vertía del termo
escuchá, agua, este mate es para el rubio
que lo amo más que nada
hidratalo como nunca
así funciona feliz y locura de viento
en la moto silbaba un tema y vos me pediste que cante
y zas se me puso la piel de gallina dije el rubio es lo más grande
Ramoncito vos no te lo merecés
cosa que a todo esto yo estaba re enamorado
cosa que le doy un beso en la boca
cierro abro
Ramón en canoa
cierro abro
Ramón es cachorro
cierro abro
una galaxia llamada Ramón
cierro abro
viaje interneurona en un cohete llamado proteína
que gracias al agua bendecida
con que ceba Ramo
viaja re tranca por mi cuerpo mi cabeza
y el yuyo santiago
curaba corazones curaba vientos de locura
era conexión re bien sin interferencia porque en el campo
no había cables ni antenas
había un chico de rulos
Ramón
Ramoncito, de Santiago
un gusto buen viaje
buena suerte y buena víbora.


** Conscientes del momento económico complejo en el que gran parte de la sociedad se encuentra, dejamos abierta una vía de colaboración mínima mensual o por única vez para ayudarnos a hacer nuestro trabajo, sobre todo a la hora de solventar los gastos – muchas veces invisibles- que tienen los medios digitales. Sumate a LPP y HACÉ CLIC ACÁ 🙂


TE PUEDE INTERESAR