El 8 de marzo fue un día histórico para el feminismo a nivel internacional. El paro realizado por segundo año consecutivo traspasó las fronteras se unió en un grito global que reclama por los derechos relegados de las mujeres. En Argentina, la convocatoria creció masivamente respecto del año anterior, demostrando que el movimiento sigue creciendo, pasando por un camino irreversible que está dispuesto a cambiar las estructuras de la sociedad. (Fotos: China Díaz)
