«Dietazo» en el Congreso: aumento salarial y retroceso en tiempos de ajuste

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Los diputados y senadores nacionales recibieron un aumento salarial del 47%, muy superior al promedio de 31% de aumento en las paritarias alrededor del país. Ayer en el Congreso, la izquierda llamó a debatir este aumento, pero los representantes de Cambiemos no lo consideraron pertinente. Alrededor de las 3 de la mañana, se anunció una sorpresiva reducción de los aumentos, luego de que el debate se haya instalado en amplios sectores de la sociedad.

La misma noche que se aprobó el controvertido presupuesto anual para el año 2017, el primero presentado por la gestión de Mauricio Macri, se instaló dentro y fuera de la Cámara de Diputados el debate sobre cuánto debería cobrar un legislador nacional.

La polémica surgió luego de que se anunciara un 47% de aumento para los diputados y senadores, sumado a una actualización en sus gastos por desarraigo (cobrado por los legisladores del interior, que deben reubicarse en la ciudad de Buenos Aires) y en los pasajes que se les otorgan (que pueden cambiarse por dinero en efectivo). El sueldo promedio de un diputado este mes alcanzó los $85.000, y sumando los gastos de desarraigo y pasajes, pueden llegar a los $114.000.

El sueldo promedio de un diputado este mes alcanzó los $85.000, y sumando los gastos de desarraigo y pasajes, pueden llegar a los $114.000.

Frente a esta situación, la diputada del Frente de Izquierda Myriam Bregman planteó en la sesión iniciada en el día de ayer la injusticia que este aumento representa para el resto de los trabajadores. Afirmó que ese aumento no había sido debatido en el Congreso ni anunciado a los legisladores con anterioridad. La propuesta de discutir el aumento no obtuvo los votos necesarios para ser tratado en la Cámara, ya que el bloque de Cambiemos votó en su contra, sumando un total de 112 votos contra 104 a favor.

La propuesta de discutir el aumento no obtuvo los votos necesarios para ser tratado en la Cámara, ya que el bloque de Cambiemos votó en su contra, sumando un total de 112 votos contra 104 a favor.

Mientras la mitad de los trabajadores argentinos cobra un sueldo menor a $8.000 y todavía se está negociando un bono de $2.000 para contrarrestar la inflación, los legisladores nacionales se negaron a poner su situación salarial en el marco del ajuste presupuestario. El promedio de paritarias en todo el país fue de 31%, una realidad muy alejada de la de los diputados y senadores que los representan.

Mientras la mitad de los trabajadores argentinos cobra un sueldo menor a $8.000 y todavía se está negociando un bono de $2.000 para contrarrestar la inflación, los legisladores nacionales se negaron a poner su situación salarial en el marco del ajuste presupuestario.

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Mauricio Macri pidió a los legisladores en un discurso desde Santa Fe que la suba sea «acorde al esfuerzo de todos»y no «pasarse de largo» con los aumentos. La sociedad también ejerció una importante presión para que las modificaciones salariales sean revisadas, ya que el debate se instaló fuertemente en los medios de comunicación y las redes sociales durante el día de ayer.

Mauricio Macri pidió a los legisladores en un discurso desde Santa Fe que la suba sea «acorde al esfuerzo de todos»y no «pasarse de largo» con los aumentos.

Finalmente, ayer alrededor de las 3 de la mañana el presidente de la Cámara baja, Emilio Monzó, anunció que habría un retroceso en los aumentos relacionados a los gastos de representación, desarraigo y pasajes, aunque se mantendrían los aumentos en las dietas. De esta forma, el aumento cierra en un 31%, la cifra promedio del resto de los trabajadores. La decisión tomó por sorpresa a los mismos diputados ya que había sido el mismo Monzó junto a Gabriela Michetti, presidenta de la Cámara de Senadores, quienes habían aprobado el aumento en un primer momento.

Finalmente, ayer alrededor de las 3 de la mañana el presidente de la Cámara baja, Emilio Monzó, anunció que habría un retroceso en los aumentos relacionados a los gastos de representación, desarraigo y pasajes, aunque se mantendrían los aumentos en las dietas.

El debate por los sueldos de los diputados y senadores es difícil de cerrar, pero es importante que sea analizado en el marco de los demás recortes y ajustes que suceden muchas veces por las decisiones que surgen desde el Congreso. Los legisladores nacionales son los representantes del pueblo y, como tales, deben ponerse en su lugar a la hora de modificar la realidad del país.

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